Mario Sepúlveda, el más histriónico de los 33 mineros rescatados en 2010 de la mina San José, en el norte de Chile, pidió orar por los nueve peruanos que quedaron atrapados en una mina en el sureste de Perú el jueves pasado, y les aconsejó unión y respeto entre ellos.

“Pido a la gente que oren por ellos, yo estoy orando, me dio mucha tristeza cuando me enteré y espero que todo salga bien. Yo les aconsejo unión y respeto para salir adelante y a sus familias que los apoyen”, dijo a la AFP Sepúlveda.

Asimismo, Sepúlveda afirmó que agotará “todos los recursos” para viajar a Perú y apoyar a los mineros atrapados y a sus familias.

Los nueve peruanos quedaron atrapados bajo tierra en la mina Cabeza de Negro, un yacimiento informal de cobre. Todos se encuentran en buenas condiciones físicas y estarían cerca de ser rescatados por socorristas que remueven los escombros que bloquearon el socavón donde se encontraban.

Mario Sepúlveda fue el segundo de los 33 mineros en ser rescatado el 13 de octubre de 2010, luego de 69 días de estar atrapados a más de 600 metros de profundidad en una exitosa operación que duró 22 horas y fue seguida con expectación por millones de telespectadores alrededor del mundo.