El ex oficial del Ejército de Perú Telmo Hurtado reconoció este lunes ante un tribunal civil penal su responsabilidad en el asesinato de 31 personas en 1985 en la ciudad de Accomarca, en el sudeste del país.

Hurtado, quien fue extraditado en 2011 desde Estados Unidos, aseguró sin embargo que se limitó a presenciar las ejecuciones extrajudiciales, según informó la emisora RPP.

El ex oficial relató a los magistrados del tribunal instalado en la sala de audiencia del penal Castro Castro, donde se encuentra detenido, que las víctimas “fueron llevadas amarradas y encapuchadas hasta las trincheras y después fueron ejecutadas con armas que llevaban puestas silenciador”, indicó el medio de comunicación.

Dijo también haber recibido “la orden del jefe militar Nelson Gonzales Feria” de recoger picos, palas y preparar las trincheras donde serían ultimados los intervenidos”.

Insistió en que “creía que las personas ejecutadas eran terroristas (guerrilleros de Sendero Luminoso) capturados en acciones militares”.

Telmo Hurtado manifestó también que se le encomendó realizar “una labor de limpieza”, que consistía en la desaparición de testigos relacionados con el hecho, acontecido en agosto de 1985.

La matanza se perpetró poco después del inicio del primer gobierno de Alan García (1985-1990), que había asumido el 28 de julio de 1985.

Apodado el “Carnicero de los Andes” y luego ascendido por el ejército hasta el grado de mayor, Hurtado se fugó a Estados Unidos.

El principal acusado de la llamada “masacre de Accomarca” fue detenido en marzo de 2007 en Miami, acusado de haber obtenido una visa con falso testimonio, y extraditado a Lima en julio de 2011.