El ex presidente de Malí, Amadou Toumani Touré, derrocado el 22 de marzo por un golpe de Estado militar, declaró el miércoles a la AFP que se encuentra actualmente “en Bamako”, la capital del país, y que no está “prisionero”.
“Estoy en Bamako, y gracias a Dios mi familia y yo estamos bien”, dijo durante una breve conversación telefónica con un periodista de la AFP el jefe de Estado saliente, cuyo paradero exacto se ignoraba desde el golpe de Estado militar del 22 de marzo.
Al ser interrogado sobre el lugar donde se encuentra actualmente, el presidente respondió: “¿Es necesario? Lo importante es saber que no estoy prisionero”.
“Naturalmente, yo sigo lo que sucede. Deseo de todo corazón que la paz y la democracia triunfen en Malí. No tengo nada más que decir por el momento”, agregó.
Hacía una semana que se desconocía la suerte exacta de Touré, si era prisionero de los amotinados o si permanecía bajo la protección de soldados leales.
El jefe de la junta golpista, el capitán Amadou Sanogo, había asegurado que se encontraba bien y que estaba en un “lugar seguro”, sin dar más detalles.
