El premio Nobel de la Paz 1980, Adolfo Pérez Esquivel, pidió este lunes a la Corte Suprema que sean declarados delitos de lesa humanidad los vejámenes que sufrieron los soldados argentinos por parte de sus superiores en la guerra de las Islas Malvinas con Gran Bretaña, hace casi 30 años.

“Los mismos oficiales que llevaron adelante el terrorismo de Estado (en la dictadura entre 1976 y 1983) condujeron la guerra y disciplinaron a los soldados con las mismas metodologías del horror: vejámenes, estaqueos, torturas simulacros de fusilamiento, castigo físico y presión psicológica”, señala la presentación de Pérez Esquivel, así como de veteranos de guerra y organismos humanitarios.

El escrito a la Corte pide que esas denuncias sean declaradas como delitos de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptibles, luego de que la Cámara de Casación Penal (alzada) negara que pueda ser encuadrada en esa categoría jurídica.

“La cuestión de la guerra de Malvinas no puede disociarse del régimen que la produjo: la dictadura militar”, sostiene la presentación de la Comisión de la Memoria de la Provincia de Buenos Aires (la más poblada), que realizó ante la Corte como “amicus curiae”, es decir amigos de la justicia.

Más de un centenar de denuncias integran la presentación de los veteranos de la guerra detallando casos de torturas, vejámenes y estaqueos contra los soldados por parte de oficiales y suboficiales argentinos durante la contienda bélica de 74 días.

La dictadura militar argentina invadió el 2 de abril de 1982 las islas ocupadas por Gran Bretaña desde 1833, como un manotazo de ahogado ante el resquebrajamiento del régimen que dejó unos 30.000 opositores desaparecidos, según organismos humanitarios.

La denuncia se produce a una semana del 30 aniversario del conflicto bélico que dejó 649 argentinos y 255 británicos muertos, en medio de un aumento de la tensión diplomática entre Londres y Buenos Aires en su disputa por la soberanía del archipiélago austral.