Más de un centenar de mascotas, entre perros y gatos, así como patos y gallinas, fueron hallados muertos en la pequeña localidad argentina de Pirovano, al parecer por cebos envenenados, informaron este sábado las autoridades del lugar.

“Esto ha sido pensado y planificado por más de una persona. Aquí nadie mata un perro. Quien desparrama 30 o 100 kilos de veneno en un pueblo sabe muy bien qué está haciendo y lo que está generando. Es un hecho sumamente grave”, dijo a la prensa Eduardo Bucca, el alcalde del distrito de Bolívar, del que forma parte Pirovano, 360 km al sudoeste de Buenos Aires.

La matanza se produjo entre la noche de este jueves y el viernes cuando los animales ingirieron raciones envenenadas que estaban distribuidas en domicilios y calles de Pirovano, un pueblo de apenas 1.800 habitantes.

Bucca dijo que “entre el lunes o martes de la próxima semana se conocerán los resultados del análisis del veneno que fue distribuido en el pueblo y provocó la intoxicación y muerte de los animales”.

Los veterinarios determinaron que los animales murieron por hemorragias internas y destrucción del sistema nervioso.