El primer ministro ruso, Vladimir Putin, decretó el jueves un periodo feriado de cuatro días, incluido el 7 de mayo, día de su investidura en el Kremlin, oficialmente para que los rusos puedan “irse al campo”, indicaron las agencias rusas.

El presidente electo no hizo ninguna referencia a su toma de posesión como presidente que debe marcar su regreso al Kremlin después de cuatro años como jefe del gobierno.

Putin indicó que del 6 al 9 de mayo los rusos no irán a trabajar, ya que “la población se expresó a favor de días feriados adicionales para poder irse al campo, a sus huertos”.

El 9 de mayo, fecha en la que los rusos celebran el fin de la Segunda Guerra Mundial, es festivo cada año. Por otra parte, los sábados 5 y 12 de mayo serán laborables a cambio del 7 y del 8 de mayo.

Putin fue elegido en la presidencia con cerca del 64% de los votos el pasado 4 de marzo en condiciones controvertidas y pese a un importante movimiento de protesta.

Después de dos mandatos de presidente (2000-2008), abandonó el Kremlin para convertirse en primer ministro porque la Constitución le impedía presentarse a un tercero.

Dejó el puesto de jefe de Estado a su aliado Dimitri Medvedev, quien se apartó para que mentor pudiera regresar a la presidencia en 2012.