Un soldado acusado de matar a 16 afganos civiles podría enfrentar la pena de muerte si resulta condenado, afirmó el secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta.

El sospechoso de la matanza de afganos será sometido a la justicia estadounidense militar siguiendo las leyes de Estados Unidos, que permiten la pena de muerte en algunos casos, dijo el jefe del Pentágono a reporteros a bordo de su vuelo a Kirguistán.

Interrogado sobre si el soldado podría ser condenado a muerte, Panetta afirmó: “Tengo entendido que en estas instancias esto podría considerarse”.

Panetta condenó el hecho como una “terrible pérdida de vidas” y dijo que no estaba claro qué había llevado al soldado a matar a los civiles.

Luego de abandonar la base militar en que se encontraba, el soldado entró en casas de afganos y disparó contra familias civiles, “entonces en algún momento después de eso volvió de nuevo a la base operativa y básicamente se entregó. Contó a otras personas lo que ocurrió”, dijo Panetta.

Interrogado sobre si eso era considerado una confesión, Panetta afirmó: “Sospecho que así fue”.

“No estamos seguros de cuáles fueron las razones. Pero (el soldado) está bajo custodia. He asegurado al presidente (Hamid) Karzai que será llevado ante la justicia y deberá rendir cuentas”, declaró el jefe de Defensa estadounidense.