‘Las Rojas’ han tenido una intensa preparación e irán al Preolímpico con el sueño de la clasificación a Londres. Luego de la inédita e histórica medalla que lograron en los pasados Juegos Panamericanos, las dirigidas por Diego Amoroso han sufrido importantes cambios. Conversamos con la capitana, Javiera Villagra, que nos contó cómo se han ido adaptando y afinando detalles para llegar al mejor nivel a Japón.

¿Cuánto se siente el retiro de Michelle Wilson, Catalina Thiermann y Sofía Walbaum?

Las tres eran jugadoras con muchos procesos encima y su experiencia será difícil de reemplazar. Sofía llegó muy joven a la selección, pero con una personalidad que la hizo ganarse la titularidad desde el primer momento. Sin duda que era uno de los pilares en nuestra defensa y su partida la sentiremos mucho, pero nosotras confiamos en que cuando termine sus estudios volverá. Por lo tanto esperamos que esto no sea su retiro y sí un momento donde tiene que priorizar otras cosas.

Catalina llevaba muchos años y muchos procesos con nosotras. Siempre se caracterizó por ser muy aguerrida y tener la versatilidad de poder jugar en varias posiciones, lo cual es muy necesario en cualquier equipo. Su retiro nos deja un espacio difícil de llenar, pero sabemos que está por comenzar una etapa distinta en su vida y le deseamos lo mejor en todo lo que venga.

Con Michelle comenzamos en la seleccion en el mismo proceso (Junior 1998) y personalmente es alguien a quien echaré mucho de menos, tanto dentro como fuera de la cancha. Después de tantos años y momentos vividos, nos convertimos en más que simples compañeras de equipo y eso hace que su partida sea muy difícil para todas. Creo que ha sido la gran capitana que ha tenido el hockey en Chile y es una pena no poder contar con ella. Pero también sabemos que a todas nos llegará el momento y no me queda mas que desearle lo mejor y decirle que la extrañaremos mucho.

¿Complica el proceso el retiro de estas jugadoras pensando que quedan tres meses para el preolímpico?

Lo ideal hubiese sido haber mantenido las mismas jugadoras y haber incorporado a algunas nuevas creando una competencia necesaria en cualquier equipo. Lamentablemente no se dio de esa manera y sin duda que se echaran de menos esas jugadoras, pero luego de haber disputado esta serie de partidos contra Alemania e Italia, nos dimos cuenta de que las chicas vienen con mucha personalidad y que si logramos una buena preparación, sumando más partidos, sin duda llegaran en su mejor momento y el equipo será igual o más fuerte. La base sigue siendo la misma y las jugadoras nuevas aportan algo distinto al grupo, que hemos sabido incorporar bien. No tengo dudas de que llegaremos al torneo muy bien preparadas.

¿Cómo se ve el recambio?

El grupo que logró la medalla panamericana llevaba mucho años jugando juntas. Muchas de nosotras comenzamos durante el proceso Junior del Mundial 2001, por lo que nos conocemos muy bien y hemos logrado adquirir experiencia. Creo que esa es la unica diferencia entre la mas experimentadas y las que vienen entrando. Todos los equipos que llevan mucho tiempo jugando juntos tienen ciertos problemas cuando se comienzan a retirar algunos. Pero creo que se está haciendo un muy buen trabajo con las categorías inferiores y hay muchas chicas con ganas y personalidad que no les costará adaptarse a la selección adulta.

Lo que sí es necesario es tener gente con la misma convicción que tuvo mi generación de jugársela completamente y creer que podemos tener un nombre a nivel mundial. Creo que ese es el mayor desafío: que entiendan que para llegar donde estamos ahora, hemos tenido que sacrificar muchas cosas.

¿Por qué crees que te nombraron capitana, y cuál crees tú que puede ser tu aporte?

Cuando Michelle era capitana, yo asumía un rol de vice capitana, por lo que creo que fue un proceso natural. Llevo bastante tiempo en la selección y he tenido la suerte de poder jugar tanto en Chile como en el extranjero, y esas son las experiencias que pretendo transmitir.
Aparte de temas más administrativos, no sé realmente cuánto ha cambiado mi rol o mi manera de ser con las del equipo. Lo que sí es que es un orgullo para mí llevar la jineta de capitana y espero estar a la altura.

¿Cómo evalúas el rendimiento que tuvieron en los amistosos con Italia y Alemania?

Fuimos de menos a más con los dos equipos. Era el debut de varias jugadoras y no se achicaron en ningún momento. Lo que más necesitamos ahora es jugar partidos y seguir adquiriendo ese ritmo internacional.
Alemania es numero tres del mundo y creo que a pesar de que los resultados fueron abultados, no fuimos un rival fácil para ellas. Con Italia estamos más parejas, pero supimos demostrar los avances que hemos tenido en el juego y también la superioridad en la que nos encontramos en estos momentos. Ganemos, empatemos o perdamos, el tener partidos internacionales y de buen nivel siempre suma, por lo que esperamos poder seguir con esa línea de preparación.

¿Cuál es el objetivo en el preolímpico?

El objetivo es ganarlo. Sabemos que a ojos de cualquier eso puede ser algo que bordea lo imposible, pero nosotras nos hemos dado cuenta de nuestras capacidades y de que podemos lograr algo grande. Nos hemos enfrentado a todos nuestros rivales durante los últimos años, y a pesar de que no siempre los resultados fueron positivos, sí sabemos que somos equipos parejos y que por lo mismo la oportunidad de ir a unos Juegos Olímpicos esta ahí.

¿Qué le falta afinar al equipo para estar al nivel de pelear el oro en Japón?

Lo que nos falta es jugar más partidos, ir puliendo el tema de los cortos, que son oportunidades que no podemos perder y llegar en el mejor estado físico posible. Debemos poder aguantar el mismo tipo de presión durante los 70 minutos y no caer en bajones tan grandes como a veces lo hacemos. Lo importante es que la motivación está y el compromiso de lograr algo grande también.

¿Cuáles son tus planes a futuro?

La verdad es que me encuentro muy cómoda jugando en el extranjero. Llevo casi cuatro años en España y estuve otros tres jugando y estudiando en Estados Unidos. Creo que el hecho de participar en ligas competitivas hace que siga en mí el deseo de seguir jugando. La realidad chilena no apoya al deportista amateur y el sacrificio de quienes están aquí es mucho mayor que el de quienes estamos fuera. Por lo mismo, soy la primera en fomentar que salgan del país y entrenen en otras ligas. Nunca pensé que jugaría tantos años afuera y ahora no me puedo imaginar dejándolo.