La comunidad indígena RupuLafken, ubicada en el kilómetro 5 del camino hacia el lago Cabrera, solicitó participar de un estudio de impacto ambiental que realizará la empresa Piscicultura Los Canelos para instalarse en el sector.
Desde 2004 las comunidades indígenas se oponen a la instalación de estas empresas en la zona, porque en el proceso iniciado por el noruego André Flem para instalar la pisciculturas Los Arrayanes y Los Ulmos, se les negó el derecho a participar de un estudio de impacto ambiental.
En ese tiempo, los lugareños denunciaron la contaminación del río Cuchildeo, malos olores y el transporte de salmones por las noches.
Según Juana Montiel Paillan, representante de la comunidad indígena RupuLafken, ya pagaron el noviciado con la instalación de las dos primeras pisciculturas. Ahora con Los Canelos solicitan que el Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) acoja la solicitud de estudio de impacto, pues señaló que como indígenas tienen derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación.
La comunidad ya se hizo asesorar por la abogada Orieta Llauca con el objetivo de delinear las acciones a seguir respecto a las familias que se vean afectadas por el proyecto.
