La familia del hombre muerto durante el toque de queda post terremoto, en Hualpén, espera que los cinco infantes de marina acusados reciban la mayor condena posible. Lo anterior, luego de enterarse que el Fiscal Naval cerró la investigación, entrando a etapa de plenario, antesala de la acusación contra los uniformados.

La madrugada del miércoles 10 de marzo de 2010, David Daniel Riquelme Ruiz (45), fue encontrado muerto con signos de haber recibido una brutal golpiza, en la cancha de fútbol de la población El Triángulo de Hualpén.

El amigo del fallecido y sobreviviente, Iván Rojas, declaró que en medio del toque de queda -a la 1 y media de la madrugada- salieron a comprar cigarrillos, pero en ese momento habrían sido reducidos y golpeados por los infantes de marina, subidos a una camioneta y vueltos a golpear en una playa, para finalmente abandonarlos en la cancha.

Los acusados son 5 integrantes del Destacamento de Infantería de Marina Número 3 Sargento Aldea, de Talcahuano, quienes fueron sometidos a proceso por el delito de violencia innecesaria con resultado de muerte. Quien estuvo a cargo del Fiscal Naval, capitán de fragata de Justicia, Alejandro Henríquez, quien cerró el sumario, el que entró a la etapa de plenario tras la cual presentará la acusación a los involucrados.

La madre del fallecido, Elsa Ruiza (86), recordó el estado en que encontró a su hijo en la cancha, situación de la que aún no se repone.

El Servicio Médico Legal determinó que murió por golpes con objetos contundentes, compatibles con las culatas de las armas de los infantes y a su calzado. Una muerte cruel sin justificación, porque si bien el fallecido violó el toque de queda, correspondía su arresto, señaló Elsa, sobrina del occiso.

Lilibeth es hermana del fallecido y a casi dos años de su violenta muerte, recordó que David Riquelme no era un delincuente, no tenía antecedentes policiales y que su condición económica desmejoró por su epilepsia.

La familia espera 10 años de cárcel para los dos superiores y 5 años para los tres restantes. También agradecieron el trabajo de la Brigada de Homicidios de la PDI, fundamental para conseguir las pruebas y testimonios.

Los involucrados son los sargentos segundo, Jorge Elgorriaga Lavín y Cristian Martínez Flores, más el cabo segundo José Caamaño Sepúlveda y los soldados Omar Valdebenito Navarrete y Esteban Muñoz.