“Terminar la vida de una manera elegante y eufórica” fue la premisa del ingeniero Julijonas Urbonas, el creador de un nuevo método para aplicar la eutanasia a seres humanos: una escalofriante montaña rusa.

Este particular diseño, bautizado como “Euthanasia Coaster”, representa una estructura que desarrolla una velocidad a niveles altísimos, donde resultaría difícil oxigenar el cuerpo, provocando una serie de emociones durante el camino.

Incluso, Urbonas señala en su sitio web que la persona logra intensas sensaciones, como pasar de la euforia a la adrenalina, después un túnel de visiones hasta perder el conocimiento y, eventualmente, morir.

El recorrido, que dura aproximadamente 3 minutos y 20 segundos, cuenta con una altura de 510 metros y una longitud de 7.544 metros. Sólo la subida toma 120 segundos, para después experimentar una caída de 10 segundos, seguido por una serie de “loops” o vueltas hasta el final del juego.

Además, este hipotético método de eutanasia expone a los pasajeros a un minuto de 10G (Fuerza G), lo que equivale a un viraje máximo en aviones acrobáticos, y lograría llegar a los 100 metros por segundo.

Esto, equivale a tres veces más de lo que genera la atracción favorita en parques de diversiones, “Dragon Khan”, adrenalínica montaña rusa ubicada en España que alcanza una aceleración de 29 metros por segundo.

La creatividad en la maqueta, según señaló Julijonas Urbonas, se logró gracias a la avanzada investigación interdisciplinaria en medicina espacial, además de sus principios y motivaciones.

Cabe destacar que para su concepto, el ingeniero se inspiró en las palabras de John Allen, presidente de Filadelfia Toboggan Coaster (constructores de juegos mecánicos), quien dijo que: “La última montaña rusa construida será cuando envíes más de 24 personas a bordo y todos vuelven muertos”.

Sin embargo, el modelo ha generado críticas. En el diario inglés DailyMail, señalan que el concepto surrealista del ingeniero fue rechazado por líderes de Organizaciones Anti-Eutanasia, quienes dicen que el “imaginativo” diseño es un abuso a los humanos.

También, el médico británico Peter Saunders de “Care Not Killing”, quien aprecia el sentido del artista en cuanto al humor y despreocupación, agregó que la vida nunca debiera ser quitada “humanitariamente con la elegancia y la euforia” y que, con este método, la última sensación que experimentará el pasajero podría ser un vértigo abrumador y susto, añadió el medio inglés.

Por último, es importante señalar que la eutanasia de humanos se practica en Holanda, Bélgica, en algunos sectores de Estados Unidos y Suiza, pero bajo circunstancias muy específicas en cada país.

Euthanasia Coaster from Julijonas Urbonas on Vimeo.