El capitán y el segundo de a bordo de un carguero varado desde hace cinco meses en un arrecife neozelandés, que provocó un vertido de más de 300 toneladas de combustible, se declararon culpables de navegación peligrosa y obstrucción a la justicia, por lo que podrían ser condenados a penas de cárcel elevadas, indicó el miércoles una fuente oficial.

El portacontenedores “Rena”, de bandera liberiana, encalló en el arrecife de Astrolabio el 5 de octubre, cerca de la localidad turística de Tauranga (costa este de la isla Norte).

Los dos oficiales del “Rena”, de nacionalidad filipina, comparecieron ante un tribunal de Tauranga y reconocieron haber tomado una vía más cercana al litoral para ganar tiempo y haber destruido informaciones de navegación antes del registro de la embarcación.

El capitán se declaró además culpable del vertido de sustancias peligrosas, según la autoridad de asuntos marítimos de Nueva Zelanda.

El veredicto será pronunciado el 25 de mayo.

A causa del accidente, el “Rena” liberó más de 300 toneladas de fuel, que contaminaron las playas de una costa rica en flora y fauna marinas.

Propiedad de la empresa armadora griega Costamare Shipping Company, el carguero se partió en dos en el mes de enero. Los equipos de socorro siguen en la zona descargando los centenares de contenedores que continúan a bordo.