Los colegios electorales abrieron sus puertas este sábado en Letonia en donde los electores deben pronunciarse en un referéndum sobre el reconocimiento del ruso como segunda lengua oficial de esta ex república soviética.

La minoría de lengua rusa representa un tercio de los dos millones de habitantes de este país del Mar Báltico que mantiene tensas relaciones bilaterales con Rusia.

Los partidarios del “Sí” esperan que esta consulta ponga fin a una forma de discriminación, mientras que los que se oponen a la medida estiman que la defensa de la independencia letona pasa por el “No”.

Es muy poco probable un resultado afirmativo de la consulta, según los pronósticos, pero para los rusos de origen, este referendo sirve de prueba.

La organización se logró tras una petición de un movimiento pro ruso “Lengua natal” firmado por 10% del electorado.

Los letones de origen recuerdan en esta ocasión que miles de sus conciudadanos fueron enviados por los soviéticos a los campamentos de Siberia y que el ruso fue impuesto en la vida pública cuando el país estaba dominado por Moscú.

Letonia, que se independizó de Moscú en 1991 tras 50 años de dominio soviético, ingresó en 2004 a la Unión Europea y a la OTAN.

Tras la independencia, los inmigrantes rusos que se habían instalado en este país tuvieron que pedir la nacionalidad letona y pasar un examen de lengua.