En la basílica de San Pedro se realiza la solemne ceremonia para la “creación” de 22 nuevos cardenales, la cuarta promoción del pontificado de Benedicto XVI.

Los nuevos “príncipes” de la Iglesia, entre ellos un solo latinoamericano, el brasileño Joao Braz de Aviz, y el español Santos Abril y Castelló, recibirán la birreta roja así como el título y el anillo cardenalicio durante una única ceremonia a la que asistirán cerca de un centenar de cardenales de todo el mundo.

El Papa entró a la basílica a bordo de una tarima móvil para evitar reccorrer a pie el templo y ha sido ayudado por dos asistentes a llegar al altar.

La ceremonia, concelebrada por más de un centenar de purpurados, quienes visten sus solemnes trajes rojos litúrgicos, se desarrollará en varios idiomas.

En la lista de los nuevos príncipes de la Iglesia figuran cuatro prelados con más de 80 años, que no podrán votar al sucesor de Joseph Ratzinger.

El Papa alemán terminó por reforzar el peso de la Iglesia italiana elevando a 30 los electores en el cónclave procedentes de Italia, lo que aumenta de hecho las posibilidades de que el próximo Papa sea italiano.

América Latina, con el 46% de los católicos del mundo, pasa a contar con 32 cardenales, de los cuales 22 son electores, entre ellos seis brasileños y cuatro mexicanos.

Los europeos siguen ostentado una amplia mayoría con 67 cardenales, entre los que hay seis alemanes, cinco españoles, cuatro franceses y cuatro polacos.

Con las nuevas “creaciones”, término religioso, el número de miembros del Sagrado Colegio se eleva a 213, de los cuales 125 son “electores” en caso de elección del Papa.