Una desagradable sorpresa se llevó Gladys Kapuwi, una mujer residente en Hawái, tras descubrir no sólo que los cuidadores de su mascota le habían cercenado una oreja a su cachorro, sino que intentaron “reparar” el daño volviéndola a unir con pegamento.

Tras descubrir que a su perro, un pequeño maltés-pomerania, le faltaba un trozo de una de sus orejas, la mujer lo llevó a un veterinario cercano, donde el facultativo confirmó no sólo la mutilación sino que -en un acto aún más sorprendente- habían intentado volver a unirla con pegamento.

“No podía creer que hubieran hecho eso. Me puse a llorar porque es como nuestro bebé”, afirmó la mujer al sitio local de noticias, HawaiiNewsNow.

La acusación recae sobre la cadena de tiendas de mascotas Petco, de la que no es primera vez que se tienen noticias sobre malos cuidados a los animales. Anteriormente, al perro de otra mujer identificada como Estelle Green, le cortaron las garras tan cortas que regresó a su hogar sangrando.

Ahora ambos propietarios se unirán para demandar a la cadena por daños.

“Cuando reclamé, me ofrecieron regalarme una nueva sesión de peluquería canina. Creo que todavía querían quitarle otras partes del cuerpo”, indicó Kapuwai.

“El veterinario me dijo que podría haberle vuelto a suturar la oreja si me hubieran dicho en el momento, pero prefirieron tratar de ocultarlo”, sentenció.

http://youtu.be/2sUCr_GfvcM