Aunque hace años se conocían sus problemas de drogas y violencia intrafamiliar, la muerte de Whitney Houston tomó por sorpresa al mundo este sábado.

Recién este martes, la cantante había participado junto a su hija Bobbi Kristina de la fiesta por el Grammy, Kelly Price & Friends Unplugged: For The Love Of R&B, organizada en Los Ángeles, California.

Allí Houston felicitó a su colega e incluso cantó brevemente con ella una sección de “Yes, Jesus loves me”, ya que ambias habían sido parte de un coro religioso en sus inicios.

Sería su última canción antes de fallecer.

http://youtu.be/z_yiCIow6fI