La última reacción se produjo este viernes, cuando el portavoz del Vaticano, el padre Federico Lombardi, calificó de “delirante” un documento secreto escrito en alemán, según el cual el papa Benedicto XVI podría ser asesinado en los próximos meses.

La información revelada por el periódico Il Fatto Quotidiano, retoma una declaración que habría hecho el arzobispo de Palermo, Paolo Romeo, en ocasión de un viaje a China en noviembre, y no da ninguna precisión sobre la naturaleza o la identidad de los supuestos conspiradores.

El cardenal Romeo desmintió personalmente las afirmaciones que le atribuye el texto, declarándolo “carente de fundamento”, ya que el documento evoca el complot de forma totalmente vaga.

Según este texto anónimo, Benedicto XVI tendría una relación “muy conflictiva” con el cardenal Secretario de Estado, Tarcisio Bertone, y buscaría reemplazarlo.

Sin embargo, según numerosos testimonios, el Papa tiene una fuerte relación de confianza con él.

Además, se acusa un grave caso de corrupción, ya que hace 15 días, fueron reveladas las cartas del ex secretario general del Governatorato del Vaticano, Monseñor Carlo Maria Vigano, dirigidas al cardenal Bertone y al Papa, en un programa del canal privado La Sette.

En ellas, Monseñor Vigano criticaba la corrupción y estimaba que algunos dirigentes “privilegian sus intereses” en detrimento de los de la Iglesia.

El Vaticano reconoció la autenticidad de estas cartas pero criticó una difamación y una “desinformación” de la prensa.