El presidente francés Nicolas Sarkozy “lamenta profundamente” el doble veto chino y ruso a una resolución de la ONU sobre Siria, y ello “a pesar del respaldo de los otros 13 miembros” del Consejo de Seguridad, anunció el sábado por la noche la presidencia en un comunicado.

“El presidente de la República lamenta profundamente que debido al voto de dos miembros permanentes, y a pesar del respaldo de los otros 13 miembros, el Consejo de Seguridad no haya podido, por segunda vez, expresarse sobre la situación en Siria”, declaró la presidencia.

El veto “alienta al régimen sirio a perseverar en su política cruel y sin salida”, añadió.

“Desde marzo de 2011 el régimen de Damasco respondió a la aspiración legítima del pueblo sirio a la libertad y a la democracia con una feroz represión y promesas sin futuro”, lamentó Sarkozy.

“La tragedia siria debe terminar”, agregó el presidente en un comunicado.

“El uso masivo de la fuerza armada contra civiles, el recurso generalizado a la tortura, la violencia ejercida contra centenares de niños son indignantes”, agregó el comunicado del presidente para quien “los que ordenan, cometen o dejan cometer tales crímenes contra la humanidad deberán responder”.

Por su parte, el canciller francés Alain Juppé estimó en declaraciones a un canal de televisión que el veto ruso “paraliza a la comunidad internacional”.

“Es difícil entenderlo en especial porque hicimos muchos esfuerzos para aceptar las enmiendas presentadas por Rusia y por China”, declaró Juppé.

“No había en esta resolución un embargo de armas, no había sanciones, tampoco un llamado a la partida de Bashar al Asad”, subrayó el canciller francés enumerando las concesiones hechas a Rusia y a China por los otros miembros del Consejo de Seguridad.

Como el 2 de octubre pasado, China y Rusia vetaron este sábado un proyecto de resolución que condena la represión de las protestas por el régimen sirio, el día en que en Homs, centro de Siria, más de 230 civiles murieron en bombardeos, según la oposición.