La utilización de Twitter ha distendido a varios comisarios europeos, quienes últimamente se animan a dar opiniones más osadas en la popular red social, revolucionando los estrictos códigos de comunicación del ejecutivo en Bruselas.

Al menos trece comisarios europeos utilizan esta herramienta, que tiene 100 millones de usuarios activos en todo el mundo. Entre ellos la sueca Cecilia Malmstrom, encargada de asuntos interiores, quien suelta en la popular red de microblogs declaraciones bastante más audaces de las que suelen hacer estos funcionarios afincados en Bruselas.

“Al fin una cumbre en la que se habla del empleo y del crecimiento. Pero es demasiado poco y demasiado tarde”, comentó tras la cumbre europea del 30 de enero.

Y al menos en esta plataforma, no hay ningún control sobre lo que expresan los comisarios, conocidos por sus artes de la diplomacia.

“Es imposible, ya es demasiado tarde”, afirmó una fuente de la institución.

No hemos impuesto ninguna regla en este respecto, aseguró a la AFP la portavoz del ejecutivo Pia Ahrenkilde Hansen.

“Cada comisario utiliza este canal informal para comunicar sobre su política y la actualidad”, explicó.

Allí “expresan sus posturas personales, pero también las de la Comisión”, añadió.

Usuaria desde el 11 de enero, Cecilia Malmstrom es aún novata en esta red, pero su cuenta ya tiene 1.307 abonados, entre ellos claro varios periodistas y diputados europeos.

De todas maneras, la cuenta de Malmstrom está lejos de ser tan popular como la de algunos de sus colegas como Connie Hedegaard (Clima), Viviane Reding (Justicia) o Neelie Kroes, la comisaria encargada de Nuevas Tecnologías, que cuenta con 34.759 abonados.

Muy activa en esa red social, Kroes ha dado a conocer -todo en mensajes de 140 caracteres como lo exige Twitter- su oposición a los proyectos de ley antipiratería en Estados Unidos, iniciando un debate feroz con su homólogo francés Michel Barnier, ardiente defensor de la propiedad intelectual.

En medio del acalorado debate cibernético, recibió el apoyo de Viviane Reding y Malmstrom, quien escribió que el proyecto de ley estadounidense SOPA (Stop Online Piracy Act) significaba “basura” en sueco.

Cecilia Malmstrom, Neelie Kroes, Connie Hedegaard y Viviane Reding “son políticas”. Twitter les “devolvió el uso a una libertad de expresión que se les había limitado” por los acartonados procedimientos de la Comisión en materia de comunicación, dijo un allegado a las comisarias.

“Sería imposible hacer validar cada tweet antes de su publicación”, precisa una fuente de la institución.

“Twitter es una bocanada de aire fresco en la comunicación oficial”, dijo otra.

“El propio presidente de la Comisión, José Manuel Barroso, estimuló a los comisarios a usar Twitter”, subrayó.

“Debemos estar presentes en los medios que las personas utilizan y debemos adaptarnos”, explicó. “Pero nunca remplazarán a los canales de comunicación tradicionales”, insistió.

De todas maneras, Twitter sí que distendió y convirtió en más auténticas las declaraciones oficiales y ya las autoridades llevan a cabo un estudio para darle un toque más humano a sus declaraciones..

“A veces damos la impresión de habernos convertido en robots”, dijo un portavoz.