Más de mil niños participan de las actividades de los Centros de Vacaciones Solidario (CEVAS)de la Pastoral Juvenil del Arzobispado de Concepción. La idea es entregar un momento de diversión a los pequeños que no tienen la posibilidad de salir en vacaciones.

Hace 32 años que los CEVAS llegaron a Concepción y este verano más de mil niños, de 5 a 12 años, se sumaron a las actividades.

Con paseos a piscinas, caminatas y decenas de talleres, cerca de 500 jóvenes de la Pastoral Juvenil dedican su tiempo libre a los pequeños, que por razones económicas o porque sus padres trabajan, no pueden salir de vacaciones.

Este año los CEVAS llegaron a Cañete, Hualqui ,Tomé, Curanilahue entre otras comunas. Paula Contreras, asesora de la iniciativa, entregó más detalles.

Hasta ahora son 800 los menores que han participado de los talleres, actividades que finalizarán a mediados de febrero. Los voluntarios siguen recibiendo aportes de la comunidad en las parroquias donde están trabajando, para así entregar un momento de diversión a cerca de mil 300 niños que están de vacaciones.