El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, estimó este domingo que la crisis entre Sudán y Sudán del Sur alcanzó “un punto crítico” que la convierte en una “seria amenaza para la paz y la seguridad” en la región.

“La situación en Sudán y en Sudán del Sur ha alcanzado un punto crítico, convirtiéndose en una seria amenaza para la paz y la seguridad en la región”, declaró el responsable onusiano en Adis Abeba, donde participa en la 18ª cumbre de la Unión Africana (UA).

La rivalidad entre Sudán y Sudán del Sur se ha incrementado, con acusaciones de ataques por ambos bandos, apenas seis meses después de que éste último país se volviera independiente del norte merced a un acuerdo de 2005 que puso fin a más de dos décadas de guerra civil.

No obstante, sigue habiendo cuestiones clave sin resolverse: no han acordado una frontera, el reparto de los ingresos petroleros, ni cómo dividir la deuda previa a la secesión.

“La comunidad internacional debe actuar y debe hacerlo ya”, reclamó Ban. “Cuanto más se tarde en solucionar las cuestiones no resultas, más se incrementarán las tensiones”, agregó Ban, quien se mostró “profundamente preocupado” por la posibilidad de estallido de una nueva guerra.

Ban acusó a los dos presidentes, Omar al Bashir (Sudán) y Salva Kiir (Sudán del Sur), de “falta de voluntad política” para solucionar el conflicto e instó fundamentalmente al presidente sudanés a cooperar con la ONU.