La bielorrusa Victoria Azarenka, cabeza de serie número 3, ganó este sábado el Abierto de Australia de tenis al derrotar en la final a la rusa Maria Sharapova (N.4) en dos sets, 6-3 y 6-0, y tiene asegurado el próximo lunes el primer lugar del ránking mundial.

Se trata del primer título de Grand Slam para Azarenka, de 22 años, que estaba por primera vez en la final de un ‘grande’. Con esta victoria la bielorrusa será la sucesora a la cabeza del ranking WTA de la danesa Caroline Wozniacki.

Su mejor resultado hasta ahora era una semifinal en Wimbledon en 2011 y nunca había pasado del tercer lugar del ranking, que ocupaba desde septiembre de 2011.

“He vivido un mes increíble en Australia y es un sueño hecho realidad”, dijo Azarenka en la ceremonia de entrega de premios, y dio las gracias a su equipo, sus amigos, sus padres y su abuela, “la persona que más me inspira en la vida”.

Por su parte Sharapova (N.4), de 24 años, no consiguió ganar su cuarto título de Grand Slam y su última victoria remonta a 2008, cuando ganó en Melbourne. Sus resultados se vieron luego lastrados por una lesión grave en un hombro.

Al principio de su carrera se había llevado el torneo de Wimbledon (2004) y el abierto de Estados Unidos (2006).

La derrota de Sharapova, su segunda en una final de Grand Slam en los últimos meses tras perder en Wimbledon el año pasado contra la checa Petra Kvitova, abre el camino a una nueva generación de tenistas de la que Azarenka forma parte.

La rusa, que se habría convertido en número 1 en caso de victoria, un lugar que ocupó por primera vez en julio de 2008, pasará el lunes a ser número 3 mientras que Kvitova conservará su segundo lugar.

La victoria de Azarenka confirma su trayectoria ascendente en 2012, en el que todavía no perdió ningún partido y con dos títulos ganados, el de este sábado en Melbourne y también el torneo de Sídney.

En la semifinal contra la belga Kim Clijsters, campeona vigente, la bielorrusa ya demostró la sangre fría que le había faltado hasta ahora y mantuvo la concentración hasta el tenso final del partido.

Gracias a esta confianza, en parte fruto de su colaboración desde principios de 2010 con el entrenador francés Sam Sumyk, la tenista pudo este sábado tomar el control de la final a pesar de un mal arranque.

Azarenka empezó cediendo su primer juego de servicio tras dos dobles faltas. Pero cuando iba perdiendo 2-0 empezó a remontar y ganó un total de 12 juegos, contra uno solo para la rusa.

Ya sin nervios, la bielorrusa empezó a responder golpe a golpe a la potente Sharapova y gracias a su mayor movilidad pudo dominar a su rival, que cometió muchos errores (30 faltas directas contra 12 para Azarenka).

Tras un primer set peleado, el segundo fue un paseó para la bielorrusa, que lo terminó en 36 minutos.

“Hoy ella fue mucho mejor que yo. En esta cancha viví grandes momentos pero también duras derrotas. Hoy ha sido el caso pero volveré”, dijo Sharapova tras las derrota.