Durante la década del setenta, Chile estuvo cerca de enfrentarse con Argentina en un conflicto bélico. Esto porque entre ambas naciones no había acuerdo sobre el trazado de la boca oriental del Canal Beagle, hecho que afectaba la soberanía de las islas ubicadas al sur del mismo, al este del meridiano del Cabo de Hornos y a los espacios marítimos adyacentes.

El problema se centró principalmente en la disputa por las islas ubicadas en el área del denominado “martillo”, polígono definido en el Compromiso de Arbitraje de 1971 en el que se encuentran ubicadas las islas Picton, Lennox, Nueva e islotes contiguos.

A raíz de esto, Chile como estrategia defensiva estableció en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena 17 campos minados repartidos en dichas islas, con un total de 3.492 minas antipersonales (MAP).

El Desminado Humanitario

Afortunadamente el país, tras la exitosa mediación del Papa Juan Pablo II, evitó un conflicto con la nación trasandina. Sin embargo, las MAP quedaron activadas, transformándose en un peligro para las personas y comunidades que habitan en las inmediaciones de los campos minados.

Ante esto, Chile presentó una solicitud de prórroga en la Convención de Ginebra, Suiza, con la finalidad de completar desde el 2012 al 2020, íntegramente el proceso de Desminado Humanitario, política que preside el Ministerio de Defensa Nacional mediante la Comisión Nacional de Desminado (CNAD).

En este sentido, la Armada a través de la Tercera Zona Naval, ha asumido la importante misión de liderar el proceso de desminado con el personal de la Partida de Operaciones de Minas Terrestres (POMTA), unidad integrada por miembros del Destacamento Infantería de Marina N°4 “Cochrane” especializado en el levantamiento de minas antipersonales que se ubican en la Región de Magallanes y Antártica Chilena. Esta unidad fue creada el 12 de junio del 2000 para dar cumplimiento a la Convención de Ottawa “Sobre la Prohibición del Empleo, Almacenamiento, Producción y Transferencia de Minas Antipersonales y sobre su Destrucción”, la cual entró en vigencia en nuestro país el 2002 y ratificada hasta ahora por 158 países.

Proceso de certificación

Camino al total desmantelamiento de artefactos explosivos, la POMTA ha conseguido un nuevo logro. Luego del cierre de los campos en isla Hornos (2008-2010), este año se certificó el segundo de los cinco campos minados de la Isla Picton, el CM-112, área donde se detectaron, neutralizaron y destruyeron 64 minas antipersonales.

El Jefe del POMTA, Teniente Primero Ricardo Barraza, señaló que para la certificación “la POMTA debió presentar a la unidad certificadora, que es el Centro de Entrenamiento de Desminado y Desactivación de Explosivos (CEDDEX), todos los antecedentes empleados en el levantamiento del campo minado, como la orgánica, tipo de procedimientos, datos históricos y reportes diarios”.

Además, la unidad certificadora se trasladó hasta la Región con el objetivo de visitar en terreno la Isla Picton, para verificar la calidad de la remoción y limpieza del campo minado levantado, todo según las Normas Internacionales de Acción contra las Minas (IMAS) que preside Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Una vez aprobado este proceso, el CEDDEX deberá emitir el “Acta de Acreditación del Plan de Muestreo para Certificación Manual”, documento que será enviado a la CNAD, quien finalmente validará el trabajo realizado bajo la firma del Ministro de Defensa Nacional.

Desminadores

Desminadores