Unos 25.000 policías y militares estarán movilizados durante los Juegos Olímpicos de Londres, donde el mayor riesgo será un “ataque terrorista”, explicó uno de los responsables de Scotland Yard, Chris Allison, durante un ejercicio de seguridad en el río Támesis.

A nivel nacional, unos 12.000 policías estarán respaldados por 5.000 soldados, y otros 7.500 militares ayudarán al comité organizador en las instalaciones olímpicas, precisó Allison a la AFP.

“El objetivo de nuestra operación es tratar de disuadir a los terroristas y a los que deseen perturbar los Juegos”, explicó el coordinador de la seguridad olímpica en Scotland Yard.

El ejército, que dispone de helicópteros y de aviones de combate si estos fueran necesarios, sería llamado a respaldar a la policía en caso de “ataque terrorista aéreo”, agregó.

La policía luchará también contra “el crimen organizado como la reventa de entradas en el mercado negro, las falsificaciones” y las manifestaciones habituales en un evento considerado como una posible “plataforma para hacer oír su voz”.

Allison hizo estas declaraciones al término de ejercicio de la policía y de los Marines Reales en el Támesis, que atraviesa la capital británica.

Estos ejercicios están destinados a “permitirnos trabajar estrechamente con los Marines para que ellos entiendan como trabajamos nosotros y nosotros comprendamos como operan”, explicó el alto mando policial.

El 7 de julio de 2005, un día después de designación de Londres como sede de los Juegos de 2012, Londres fue sacudida por una serie de atentados en su red de transporte público, que dejaron 52 muertos, además de los cuatro kamikazes.