Conmoción generó esta semana la historia de Liam Wood, un británico de 13 años que murió el pasado domingo mientras jugaba un partido de fútbol en la ciudad de Knutoon (Inglaterra), precisamente, tras celebrar un gol con familiares que lo miraban desde las graderías.

De acuerdo a lo informado por DailyMail, el chico había marcado el 5-0 para su equipo ‘AFC Saints’ cuando se desvaneció en el campo de juego. Esto, luego de ser sustituido y haber pedido volver a la cancha.

Tras el hecho, un espectador del juego logró reanimarlo por unos momentos, sin embargo, falleció a los pocos minutos en el Hospital Universitario de North Staffordshire.

El director técnico del equipo de fútbol, Marcos Lawton, indicó que “Fue una sorpresa total, porque estaba jugando normal, marcó un gol y lo celebró con su padre y abuelo (…) Había vuelto a la línea de medio campo y cuando el juego se reinició, caminó unos pasos y cayó fulminado”.

“Era un muchacho muy popular, amante del fútbol y que hacía grupo con sus compañeros”, agregó otro representante del equipo.

Luego de conocerse la historia de Liam, cientos de personas rindieron tributo al menor depositando flores en la cancha, en el Saint John Fisher School de Newcastle.