El Departamento de Estado estadounidense informó este miércoles que reducirá nuevamente su personal diplomático en Damasco debido a los temores por su seguridad en medio de la continua violencia reinante en Siria.

“El Departamento decidió reducir más el número de empleados presentes en Damasco, y ordenó a algunos empleados dejar Siria lo antes posible”, dijo la cancillería estadounidense.

Esta decisión refuerza la medida adoptada ya en octubre, que redujo el número de empleados diplomáticos estadounides en Siria y prohibió a sus familias visitarles en el país, sacudido por manifestaciones de una oposición duramente reprimida por el régimen del presidente Bashar al-Asad.

Debido a la disminución de funcionarios, solo se podrá acceder al consulado con cita previa, dijo el Departamento de Estado.

El Departamento de Estado también advirtió que la capacidad de la embajada para proporcionar asistencia de emergencia a los estadounidenses en el lugar era “muy limitada y podría ser aún más debido a la seguridad inestable”.

El embajador de Estados Unidos en Damasco, Robert Ford, dejó el país repentinamente a finales de octubre por amenazas creíbles a su seguridad personal antes de regresar a Siria en diciembre.