Los adultos mayores que están empezando a tener problemas con la memoria se pueden beneficiar de una terapia con pequeñas cantidades de nicotina, según un estudio realizado en Estados Unidos.

La investigación divulgada parcialmente en la revista Neurology, revista médica de la Academia Americana de Neurología, incluyó a 74 no fumadores con una edad media de 76 años. La mitad recibió un parche de nicotina al día durante seis meses, la otra mitad usó un parche placebo.

Aquellos en tratamiento con nicotina demostraron mejores resultados en las pruebas cognitivas de atención y memoria, así como más rapidez y coherencia para procesar la información.

Después de seis meses con el parche, el grupo de la nicotina “recuperó 46% del rendimiento normal para la edad en la memoria a largo plazo, mientras que el ‘grupo placebo’ empeoró en 26% en el mismo período de tiempo”, indicó el estudio.

Sin embargo, los autores del estudio advirtieron que los adultos mayores no deben comenzar a fumar cigarrillos para ayudar a mejorar sus funciones cerebrales, y que se necesita más investigación para ver si los efectos positivos se mantienen durante un largo período de tiempo.

Además, la nicotina es poco probable que ayude a las personas cuya memoria ya funciona bien, resaltó el autor del estudio Paul Newhouse, director del Centro de Medicina Cognitiva en la Universidad de Vanderbilt Medical Center.

“Si ya está funcionando bien, pero se desciende por la colina, la nicotina le devuelve otra vez hacia la parte superior. Un poco de la droga hace que el mal desempeño mejore”, dijo.