Productores de coca de la región boliviana de La Asunta, en el noreste de La Paz, expulsaron el domingo con violencia a un contingente de 20 militares, miembros de una fuerza dedicada a eliminar plantaciones ilegales, confirmó este lunes el ministro de Interior, Wilfredo Chávez.

“Ha habido violencia innecesaria, los dirigentes (de los cocaleros) han agredido a un teniente a cargo de la escuadra, le han propinado una herida, y otros más han sufrido agresiones”, afirmó en conferencia de prensa el ministro Chávez, al confirmar el desalojo de un contingente de uniformados.

Unos 400 campesinos obligaron a un contingente policial-militar de 20 personas a salir de La Asunta, a unos 200 km al noreste de La Paz, denunciando incumplimiento del gobierno de convenios de ayuda social y abusos de los uniformados.

El líder de los campesinos Pascual Mamani dijo a la radio privada Erbol que no hubo violencia, pero el ministro Chávez aseveró que sí.

En el cuartel de La Asunta, una zona cocalera de unos 25.000 habitantes, operan normalmente unos 200 militares y policías erradicadores, que se encontraban fuera del lugar por las fiestas de fin de año.

El ministro Chávez anunció que se convocó a los dirigentes de los cocaleros a conversar durante las próximas horas para también gestionar el retorno de todos los uniformados.

La autoridad gubernamental aseguró que el gobierno gastó desde 2008, cuando se acordó la erradicación voluntaria de coca, más de 39 millones de bolivianos (unos 5,6 millones de dólares) para obras civiles, como caminos, escuelas y sistema de agua potable.

El ministro de la Coca, Germán Loza, explicó en otra conferencia de prensa que sólo 3 de 16 sindicatos de campesinos de La Asunta se oponen a la presencia policial-militar y que las otras organizaciones están de acuerdo en eliminar plantíos ilegales.

Informó que por el momento hay tranquilidad en el poblado y que “esperamos solucionar (los problemas) por la vía del diálogo”.

Bolivia erradicó en 2011 un total de 10.509 hectáreas de plantaciones de coca excendentaria, la mayor superficie en los últimos 9 años, de las cuales 2.000 corresponden al área de los Yungas, en cuya jurisdicción se encuentra La Asunta.

Aún cuenta -según las Naciones Unidas- con 31.000 hectáreas de cocales.