El Intendente Regional, Rodrigo Galilea, destacó que como consecuencia del eficiente y coordinado trabajo entre los actores del sector público y del sector privado, se logró controlar en un tiempo óptimo los dantescos incendios forestales que afectaron desde el domingo recién pasado la Provincia de Cauquenes y cuyo foco de mayor riesgo estuvo centralizado en los sectores de Huedque y Quella.

La máxima autoridad regional estuvo acompañado en la actividad de balance por el Director Regional de CONAF, Luis Carrasco, del Jefe Regional de la Unidad de Manejo del Fuego de la misma entidad, Dante Bravo, del Director Regional de ONEMI, Carlos Bernales, del Director Regional de la Superintendencia de Combustibles y Electricidad, Francisco Valdebenito, además de la Seremi de Agricultura, Anita Prizant, del Director Regional de INDAP, Luis Verdejo y de la Directora Regional de SERVIU, Clarisa Ayala.

En el punto de encuentro con la prensa realizado este miércoles por la tarde en dependencias del Departamento de Incendios Forestales Maqui I, el Intendente Galilea dio a conocer que los incendios de Huedque y Quella, ambos en la Provincia de Cauquenes, provocaron una superficie dañada de 9 mil hectáreas, resultando seis viviendas destruidas y una capilla. “Acá es importante destacar la eficiente tarea que efectuaron CONAF, ONEMI, Carabineros, Ejercito, Bomberos, la empresa privada y el seguimiento que han hecho la Seremi de Agricultura, INDAP y SERVIU. Fueron dos incendios de gran magnitud que dejaron sus huellas negativas y ahora iniciamos la fase de ayuda para todas las familias que resultaron damnificadas”, indicó el Intendente Rodrigo Galilea.

En el sector de Huedque se vieron afectadas 4 mil 547 hectáreas siendo un 40 por ciento de bosque pino insigne, 2 por ciento eucaliptos, 28 por ciento de matorrales y 30 por ciento pastizales.

Por su parte en el sector de Quella se consumieron 4 mil 375 hectáreas, de las cuales un 40 por ciento eran de Pino Radiata, 30 por ciento de diversas plantaciones y 30 por ciento de matorrales y pastizales.

En el trabajo de combate del fuego, tanto por tierra y vía aérea, se contó con una dotación de 391 personas. El perímetro trabajado en estas acciones se calculó en 67 kilómetros.

El ataque del fuego vía aérea se realizó a través de tres helicópteros gestionadas por ONEMI y otras que fueron aportadas por CELCO. En total se lanzaron 3 mil 200 litros de agua y en promedio hubo 44 horas de vuelo permanente.

El Jefe de la Unidad de Manejo del Fuego de CONAF, Dante Bravo, reconoció que “por las condiciones climáticas reinantes en la zona y la magnitud del incendio se vivió un escenario bastante complejo, lo cual significó decretar a la Región en Alerta Amarilla y Roja, situación que no es muy común en temporada de siniestros forestales en la región. Hoy ya tenemos controlada la situación y se inicia la tarea de liquidación que a veces resulta ser más compleja que el combate. En términos prácticos el fuego está contenido y ya no hay propagación. Por eso se va a permanecer en el lugar por lo menos durante un par de días y después estarán muy atentas las fuerzas locales”.

Bravo agregó que “es muy importante destacar la preocupación que manifestó desde el primer día el Intendente Rodrigo Galilea quien participó de manera activa y estuvo presente en la organización de cada uno de los equipos de trabajo. También queremos agradecer la excelente coordinación que tuvimos con ONEMI, Bomberos, la Gobernación de Cauquenes y de todos quienes trabajaron de manera intensa”.