La oposición venezolana protegerá la identidad de los votantes en las primarias en las que se elegirá al rival del presidente Hugo Chávez para los comicios de octubre y en el exterior prescindirá de la ayuda de los consulados, con el fin de evitar “represalias políticas”.

Una de las principales medidas será la destrucción del registro de votantes dos días después de las primarias del 12 de febrero, informó el martes a la AFP Teresa Albánez, presidenta de la comisión electoral de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), coalición que agrupa a la oposición.

“Los cuadernos electorales con los nombres y números de cédula de identidad de los votantes se destruirán 48 horas después”, señaló.

Albánez explicó que la medida busca evitar “represalias o persecución política” contra aquellos que se muestren afines a la oposición, recordando que en 2004 el oficialismo publicó la lista de las firmas que permitieron convocar un referendo revocatorio del mandato de Chávez ese mismo año.

Entonces, el gobernante fue ratificado en el cargo con 59% de los votos, pero a raíz de la difusión de los nombres que apoyaron el referendo algunas personas “empezaron a sufrir una persecución política y mucha gente fue despedida de sus trabajos o ahora no puede tener contratos con el gobierno”, argumentó.

“Este es un país que está atemorizado, que tiene miedo a expresar que es de oposición y para que la gente supere ese temor hemos garantizado a todos los participantes que los cuadernos de votación van a ser destruidos”, acotó.

Precisamente por esta desconfianza, las mesas de votación en el extranjero “no van a estar en los consulados venezolanos”, sino que serán instaladas en espacios públicos, centros comerciales, sedes de organizaciones civiles e inclusive de administraciones locales, explicó la responsable.

Sectores de la oposición han denunciado “trabas” en algunos consulados a la hora de permitir la inscripción de los venezolanos en el registro electoral, criticando un “sesgo político ideológico”.

Un total de 67.000 venezolanos está habilitado para votar en el exterior, una cifra muy pequeña comparada con el total de 1,2 millones de ciudadanos que vive en el extranjero, según cifras no oficiales.

Según Albánez, estos votantes están repartidos en al menos 32 ciudades del mundo, aunque la mayor parte está en Estados Unidos, España y Colombia, principales destinos de los emigrantes venezolanos.

Faltando poco más de un mes para las primarias, Albánez indicó que el equipo electoral de la MUD está “trabajando intensamente con comisiones integradas por venezolanos residentes en varios países” que les sirven de interlocutores.

La titular comentó que la MUD puede tomar todas esas medidas para proteger la identidad de sus votantes porque las primarias no son supervisadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que sólo contribuye con “apoyo técnico” para la realización de las mismas.

De hecho, meses atrás se destruyeron las firmas que apoyaron las candidaturas de los seis aspirantes de la oposición a convertirse en el candidato único que el 7 de octubre se enfrentará a Chávez, quien goza de altos niveles de popularidad y buscará ser reelecto para un tercer mandato de seis años.

En estas inéditas primarias de la oposición, los favoritos son los gobernadores de los dos Estados más poblados del país, Henrique Capriles, de Miranda (centro), y Pablo Pérez, de Zulia (noroeste), seguidos por Leopoldo López, ex alcalde de un distrito acomodado de Caracas, según los sondeos.

Para las elecciones presidenciales del 7 de octubre, la oposición también realiza una campaña en el extranjero para que aumente el registro de votantes, con una ambiciosa meta de elevar esa cifra a unos 500.000.