El presidente sirio Bashar al Asad debería “abandonar el poder” y “dejar que su pueblo decida libremente su destino”, afirmó el martes el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, para quien los “masacres” generan “la repugnancia y la indignación”.

La comunidad internacional, dijo el mandatario francés, “debe asumir sus responsabilidades (…) denunciando una represión cruel” y debe “asegurarse de que los observadores de la Liga Árabe tengan todos los medios y la libertad de haber correctamente su trabajo”.