Gran preocupación existe en la Provincia del Ñuble por la sequía que afecta a la zona. El Intendente del Bío-Bío, Víctor Lobos, expresó que la situación se está monitoreando y que la Onemi tiene recursos para aumentar el número de camiones aljibes o estanques de agua de las comunas afectadas.

Son nueve las comunas de la Provincia de Ñuble las que están en alerta por la sequía y que exigen un plan estrátegico para abordar el problema. El presidente de la Asociación Municipios del Valle del Itata y Alcalde de Quillón, Jaime Catalán, se reunió con el Subsecretario de Desarrollo Regional para tratar el tema y advirtó que la situación se torna crítica en Portezuelo, Ninhue, Trehuaco, Coelemu y en la comuna que el representa.

Sería el terremoto el que habría modificado las napas subterráneas, acrecentando la sequía, pero según el Seremi Subrogante de Agricultura y Director Regional de la Conaf, Jaime Salas, la situación en la zona no es grave.

Ante la preocupación en el Valle del Itata, el intendente Víctor Lobos destacó que en la región no se han declarado zonas de sequía, sin embargo dijo que la Onemi y el Ministerio de Obras Públicas están monitoreando la situación para concer la dimensión del problema, un estudio que debería terminar en enero, momento en que se entregarán las posibles soluciones.

Se acerca el periodo más crítico para las comunas del Valle del Itata y el representante de los alcaldes, Jaime Catalán, señaló que aún no tienen los recursos económicos para llevar agua a los sectores rurales en camiones aljibes, dinero que según el Intendente está asegurado, e incluso la Onemi contaría con los fondos para entregar ayuda adicional a las comunas que lo necesiten.