El primer debate que protagonizaron los precandidatos de la Democracia Cristiana que competirán en primarias por el sillón municipal penquista, comprometió a los postulantes a hacer de ésta una elección limpia y sin “acarreo” de votantes, esperando que cerca de 10 mil personas participen de la votación que se realizará el 15 de enero.

Se espera que participen en la elección primaria de la DC entre el 8 y 10% del padrón electoral general, abierta para sus militantes y los independientes sin partido político.

Este sufragio determinará al representante de la Democracia Cristiana y eventualmente al candidato único de la oposición, para las municipales de octubre próximo.

El debate transmitido por Canal 9 Regional, consideró a los tres candidatos Alvaro Ortíz, Pedro Cisternas y Martín Zilic, todos comprometidos en una elección honesta, limpia, sin acarreo. Y este último tema planteó el punto más álgido al confrontar posiciones.

Cisternas se opuso al acarreo, pero reconoció que deberá combatirlo. El precandidato sindicó a Ortíz, por pintar sedes deportivas.

En la misma línea Zilic se mostró en contra de prácticas que empañen el proceso.

También contrario al acarreo se declaró el concejal Alvaro Ortíz, quien calificó esta práctica como una “cachetada a la inteligencia”.

Cuando se habla de cifras de votantes que pudieran ser arrastrados para sufragar por uno u otro candidato, traslado de buses pagados, con votos a cambio de “algo”, se trata de un número que podría superar las mil personas, pero más que la cantidad el hecho de fondo es la transparencia del acto eleccionario que pretenden cuidar los candidatos.

De darse una situación de acarreo, ésta podría estar al límite del cohecho, y en su momento podría ser analizada por la cúpulas. Entre los candidatos incluso circula la intención de firmar un acuerdo notarial para evitar esta práctica de la “compra del voto”, el que aún no prospera.