El entrenador del Barcelona, Josep Guardiola, y su centrocampista Cesc Fábregas esperaron este sábado en Yokohama, donde el domingo se enfrentan al Santos brasileño en la final del Mundial de Clubes, que el equipo haga su fútbol para frenar a la estrella rival, Neymar.

Ambos coincidieron en una rueda de prensa en su hotel de concentración en alabar al joven talento brasileño, de 19 años, pero subrayaron que el Santos es mucho más que él, porque cuenta con un plantel muy fuerte, en el que también hay hombres importantes, como Borges o Paulo Henrique Ganso.

“Intentaremos que Neymar participe lo menos posible. Para ello tenemos que dominar el juego. Es un jugador que puede desequilibrar e intentaremos monopolizar el balón para que participe lo menos posible”, explicó Guardiola.

“Este tipo de jugadores son muy difíciles de marcar. Tenemos que estar cerca de él, pero también de Ganso o Borges. Todo el mundo habla de Neymar, pero tienen jugadores muy buenos”, apuntó.

Guardiola destacó el talento que ha visto de Borges, Danilo o Arouca en partidos anteriores del Santos y destacó especialmente a Ganso.

“Ganso es un jugador fantástico, que antes de una lesión (en 2010) era de lo mejor de Brasil. La lesión lo frenó un poco, pero tiene un gran desplazamiento, utiliza muy bien las dos piernas y se asocia muy bien con Neymar, se buscan uno a otro”, destacó.

Por su parte, Cesc Fábregas también consideró importante que el Barça tenga el balón para evitar que a Neymar le lleguen balones con los que poder batir a Víctor Valdés.

“No pienso en Neymar, pienso en el Santos en general porque Neymar no es nadie sin la defensa y sin el resto de su equipo. Está claro que el chico tiene unas capacidades técnicas espectaculares, pero no tenemos que fijarnos sólo en Neymar. Si tenemos el control de la pelota, no hay Neymar”, declaró.

“No tenemos que obsesionarnos con un solo jugador, tenemos que pensar en nosotros y sólo en nosotros, como hicimos cuando jugamos contra el (Real) Madrid, el Milan o el Valencia. No vamos a dejar de hacerlo porque esté enfrente uno u otro jugador”, añadió.

El propio Neymar fue preguntado en una rueda de prensa posterior sobre esas palabras de Cesc y admitió que es cierto que si no recibe balones y el Barça controla la posesión será muy difícil para él poder ser determinante.

“Es cierto que es difícil si no me llega el balón. Yo quiero que podamos mantener el balón, pero aunque no tenga balones quiero contribuir con mis movimientos y quiero jugar en favor del equipo y de mis compañeros”, subrayó.

Neymar, de casi 20 años, es considerado la gran esperanza del fútbol brasileño, especialmente con la vista puesta en ‘su’ Mundial de 2014.

En los últimos meses han sonado con fuerza rumores que lo situaban muy cerca de fichar por el Real Madrid o el Barcelona, pero en noviembre sorprendió al mundo con una renovación con el Santos hasta 2014.