Diez militares colombianos fueron hallados culpables de la desaparición y posterior asesinato de tres hombres que fueron presentados como guerrilleros abatidos en combate en 2007, informaron este miércoles fuentes judiciales.

El segundo juzgado penal del circuito especializado de Bucaramanga (noreste) acusó de homicidio agravado a un teniente, un sargento, un cabo y a siete soldados del Ejército por la muerte de tres hombres en zona rural del municipio de El Playón, del departamento de Santander (noreste).

La pena carcelaria que deberán pagar los uniformados, detenidos desde septiembre del pasado año como medida cautelar, se conocerá en enero de 2012.

El abogado Leonardo Jaimes, representante de las familias de las víctimas, explicó que Marcos Quintero, su hijo Marco Javier Quintero y Nelson Páez fueron raptados el 26 de agosto de 2007 y horas después aparecieron muertos y vestidos con uniformes de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN).

“Dos aparecieron con uniformes y muertos por disparos y otro más falleció por inmersión”, dijo el jurista, quien además explicó que las tres víctimas eran conocidas por los pobladores de El Playón por su labor de vigilantes nocturnos y no por guerrilleros.

Este caso se inscribe en el escándalo conocido como “falsos positivos”, en referencia a ejecuciones extrajudiciales de civiles que eran presentados por los militares como guerrilleros muertos en combate, para mostrar resultados en la lucha antisubversiva y conseguir con ello felicitaciones o días de descanso.

La Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía reportó en noviembre pasado que adelantaba 8.295 investigaciones por violaciones a los derechos fundamentales, de las cuales 1.598 corresponden a homicidios cometidos posiblemente por agentes del Estado.