Unas 45.000 personas fueron evacuadas este domingo de Coblenza (oeste de Alemania) para desactivar una bomba de cerca de dos toneladas de la II Guerra Mundial descubierta en el río Rhin, informaron responsables locales.

Los habitantes que viven en un radio de 1,8 kilómetros en torno al artefacto explosivo tuvieron que abandonar la zona antes de las 05:00 horas de Chile, para lo que fueron movilizados unos 2.500 miembros de los servicios de socorro, informaron los bomberos.

Cerca de la mitad de la población de la ciudad está afectada. Dos hospitales, siete hogares de ancianos, una cárcel y varios hoteles tuvieron que ser evacuados y el tráfico fue interrumpido en la estación de trenes.

La bomba, británica, fue descubierta a finales de noviembre debido a la caída del nivel de las aguas fluviales. Ésta iba a ser desactivada este domingo junto con otro artefacto, estadounidense de 125 kilos, descubierto al mismo tiempo.

Más de 60 años después del final de la guerra, el subsuelo alemán está lleno de bombas sin explotar, vestigios de los intensos bombardeos aliados contra la Alemania nazi, que emergen regularmente, sobre todo con motivo de obras de construcción.

Las autoridades estiman que hay unas 3.000 bombas sólo en el subsuelo de la capital, Berlín.

En junio de 2010, tres artificieros que intentaban desactivar una bomba de 500 kilos perdieron la vida en Göttingen (centro) por la explosión de la misma.