Medio millar de militares fueron desplegados en las calles de Santa Cruz, este de Bolivia, para patrullar la noche del viernes al sábado junto con la policía, en el marco de un plan para reducir la ola delictiva que afecta a esta ciudad, informó la prensa local.

“El objetivo es bajar el índice de la delincuencia en la región oriental”, declaró el ministro de Gobierno (Interior) Wilfredo Chávez al diario La Razón, al precisar que la iniciativa se prolongará por un lapso de 45 días.

El plan denominado “Santa Cruz segura” fue inaugurado la noche del viernes por el Ministro de Gobierno, el Comandante nacional de la Policía y los jefes regionales del Ejército y la Policía.

Los militares portan fusiles y tienen autorización para detener a delincuentes y a personas sospechosas. El patrullaje, que se prolongó hasta primeras horas de la madrugada del sábado, fue zonificado para alcanzar mejores resultados y abarcó las áreas periféricas.

El plan será complementado con un proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana que orientará la lucha contra el crimen organizado y que cursa en instancias de la Asamblea Legislativa.