La caída en bolsa de varios valores de internet que ingresaron recientemente al piso de Nueva York despierta temores entre analistas de que se esté conformando una nueva burbuja especulativa ‘punto com’, cuando se perfila la entrada en bolsa del gigante de las redes sociales Facebook.

La página de ofertas Groupon, la red social profesional LinkedIn e incluso el portal de críticas y recomendaciones Angie’s List entraron en bolsa en 2011 y ahora cotizan cerca o incluso por debajo (en el caso de Groupon) de su precio de entrada al mercado.

Para el analista Lou Kerner, especialista del sector de internet y de las empresas que no cotizan, en la consultora Liquidnet, “Groupon resalta la dificultad de fijar el precio para una empresa con un modelo de negocios en ciernes”.

“Es un golpe para los bancos (que supervisaron la operación), y para la empresa por haber atravesado la barrera del IPO (como se conoce al ingreso en bolsa) cuando no había motivos”, agrega Kerner, un fenómeno que según el analista, recuerda vagamente la primera etapa de empresas de internet entre 1994-99.

“Vamos a ver una nueva burbuja, la cuestión es saber si estamos en la burbuja o al comienzo” del desarrollo del nuevo sector de redes sociales, agregó.

“Los inversores intentan esclarecer si estamos en el año 2000 (fecha de la explosión de la burbuja de las ‘punto com’), o en 1998″, añadió.

Sin embargo, para el experto no hay que temer por Facebook, cuyas bases son bastante más maduras que las de Groupon. Facebook está en “otra categoría”, como Google y Amazon a su entrada al mercado, cree Kerner, que considera posible una valorización en torno a los 100.000 millones de dólares para el sitio de redes sociales, como han señalado versiones de prensa.

Otros expertos en la entrada en bolsa apuntan que ademas hay factores técnicos que explican la caída de las empresas nóveles.

“Por definición, las entradas en bolsa (ndlr: empresas recientemente cotizadas) son más riesgosas que los valores con un largo historial de intercambio. Entonces, cuando el mercado presenta inestabilidades como las registradas recientemente, los inversionistas venden en mayor medida sus posiciones más riesgosas”, apunta Lise Buyer, fundadora de la sociedad VClass Group, especializada en asistir a las empresas que entran en bolsa.

La experta también resalta el papel de la especulación: “Es muy posible que haya muchos especuladores que invirtieron en las acciones (de Groupon), lo que sucede a menudo con la entrada en bolsa de las grandes marcas”.

Sin embargo, la analista advierte de la posibilidad de que se produzca un efecto bola de nieve: “Si un nuevo valor como Groupon cae en la bolsa, los inversores lo considerarán como un signo negativo y van a deshacerse de sus posiciones”.

El caso de LinkedIn sería algo distinto y se explicaría también por la emisión de acciones adicionales a mediados de noviembre: “Creo que el papel sufre por la aversión al riesgo (…) pero también hay un elemento de oferta y demanda”, estimó Nick Einhorn de Renaissance Capital, también especializado en IPOs.