Chile es el país de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) con menos enfermeras por cada 1.000 habitantes, con 0,5 de estas profesionales por médico, a pesar de que en promedio el resto de las naciones tienen 2,8.

Son 9.610 a lo largo del territorio, y se necesitan 40.000, por lo que cada 10.000 beneficiarios del Fondo Nacional de Salud hay 7,5 enfermeras, que se concentran en un 77,4 por ciento en los hospitales.

Esto significa que el mayor déficit se registra en los consultorios, donde trabajan sólo el 22,6 por ciento de estas especialistas, brecha que tardará cinco años en cerrarse, porque hay 36.076 personas estudiando Enfermería.

La cifra es preocupante si se considera, por ejemplo, que el control del niño sano, que sirve entre otras cosas para monitorear el peso de los menores, lo hace una enfermera y Chile es el sexto país con más sobrepeso infantil de la OCDE.

El ministro de Salud, Jaime Mañalich, destacó que para garantizar la calidad de las nuevas profesionales, a partir del año 2013 se les exigirá un examen para poder ejercer en el sistema público o atender con bonos de Fonasa.

El representante de la Organización Mundial de la Salud en Chile, José Antonio Pages, destacó que a pesar de esto, el país es el que tiene un mayor porcentaje de aumento en esta materia dentro de la OCDE, con un crecimiento de 12,1 por ciento en los últimos diez años.

De hecho, contando sólo desde el 2004 hasta ahora, Chile ha aumentado en un 55,9 por ciento el número de enfermeras.