Los gobiernos de Bahréin y Qatar llamaron este domingo a sus nacionales que viven en Siria a que abandonen ese país a raíz de la violencia, al tiempo que Emiratos Árabes Unidos ya aconsejó a sus ciudadanos a evitar por el momento viajar a ese país.

En Manama, el ministerio de Relaciones Exteriores pidió en un comunicado a los bahreiníes que salgan de Siria a raíz de la “inestabilidad que prevalece” y consejó a las personas que tenían programado viajar a ese país a que no lo hagan.

A su vez, en Doha el ministerio de Relaciones Exteriores pidió a los qataríes a salir de Siria “lo más rápido posible”.

Los Emiratos Árabes Unidos ya habían hecho un llamado a sus nacionales en Siria a que adopten la prudencia, y pidió que los viajes a Siria sean postergados.

La semana pasada, Arabia Saudita anunció la muerte de uno de sus nacionales en Homs, epicentro de las protestas en Siria, y llamó a los sauditas en Siria a que adopten todos los cuidados posibles.

Los países del golfo participan activamente en las reuniones de la Liga Árabe, que elaboró el sábado un paquete de sanciones a Siria que será sometido el domingo a la aprobación del Consejo Ministerial, ante la negativa de Damasco de cesar la represión de las protestas.