El sargento del Ejército José Libio Martínez, quien era el rehén más antiguo de Colombia con casi 14 años en cautiverio, figura entre los cuatro uniformados muertos este sábado por la guerrilla FARC tras combates con el Ejército, informó el ministerio de la Defensa.

Martínez fue secuestrado por las FARC junto a otros 20 militares el 21 de diciembre de 1997 en un ataque contra la base de Patascoy en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador.

Poco después, la guerrilla dejó libres a 19 de los uniformados, pero Martínez permaneció cautivo junto al sargento Pablo Moncayo, quien fue liberado de manera unilateral por las FARC en marzo de 2010.

Martínez dejó un hijo huérfano, Johan Steven, a quien no llegó a conocer pues su esposa estaba embarazada cuando fue secuestrado.

Además de Martínez murieron este sábado el coronel de la Policía Édgar Yesid Duarte, el uniformado de más alto rango entre los policías y militares que aún eran rehenes de las FARC, el teniente de la Policía Elkin Hernández, y el teniente de la Policía Alvaro Moreno.

Duarte, que también dejó una hija huérfana, Viviana, de dos años en el momento del secuestro de su padre, fue plagiado junto con Hernández el 14 de octubre de 1998 en el municipio El Paujil, en el mismo departamento de Caquetá (sur) donde fueron encontrados muertos este sábado.

Moreno había sido secuestrado el 9 de diciembre de 1999 en Curillo, también en Caquetá.

Estos cuatro hombres fueron encontrados el sábado con tiros en la cabeza y la espalda, luego de un combate entre la guerrilla y las fuerzas armadas, que realizaban un operativo de búsqueda en la zona.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), la guerrilla más antigua de América Latina con 47 años de lucha armada, tienen todavía secuestrados a por lo menos 14 policías y militares, que plantean canjear por sus guerrilleros presos.

Esta guerrilla cuenta con entre 8.000 y 9.000 combatientes, según cifras del Ministerio de la Defensa.