Un abogado mexicano presentó este viernes ante la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya una demanda contra el presidente de México Felipe Calderón por “crímenes de guerra y de lesa humanidad” en el marco de la lucha antidrogas, informaron los promotores de la denuncia.
La demanda fue presentada por Netzaí Sandoval, experto en derecho internacional, y en ella se brinda “información detallada sobre al menos 470 casos específicos de violaciones a la leyes humanitarias internacionales cometidas por fuerzas federales de seguridad”, detalló el abogado a la AFP.
Las violaciones que habrían sido cometidas por las fuerzas de seguridad “incluyen casos de tortura, ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, secuestros y la captura de migrantes (en su mayoría centroamericanos) que luego son vendidos a los cárteles de las drogas”, añadió Sandoval.
La demanda contiene más de 700 páginas, además de distintos reportes de prensa y otro material de apoyo.
Tiene el apoyo de miembros de organizaciones civiles como la Asociación de Abogados Democráticos y el Centro de Derechos Humanos Pro Juárez, entre otros, además de periodistas como Julio Sherer, fundador de la revista Proceso, e investigadores en asuntos de seguridad, como John Ackerman y Edgardo Buscaglia.
Sobre el futuro de esta denuncia, Sandoval declaró a la emisora MVS que el hecho de presentarla ante la CPI “no significa que se tomará el caso” ya que el fiscal que lo recibió primero deberá hacer “un análisis y revisión básica de la situación de México”.
Posteriormente, añadió Sandoval, deberá “darle una oportunidad al Estado mexicano para que considere juzgar (estas violaciones) mediante sus instituciones e iniciar los procesos penales en contra de los señalados en la demanda”.
La ola de violencia ligada al narcotráfico y al operativo federal para combatirlos en el que participan más de 50.000 militares han dejado más de 45.000 muertos en México, según recuentos oficiales y de la prensa.
Las autoridades atribuyen la mayoría de las bajas a los enfrentamientos entre cárteles de las drogas, pero distintas organizaciones han denunciado numerosos casos de uso de la fuerza por parte de militares contra civiles.
