El Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1, previsto para noviembre de 2012 en Texas, será eliminado antes de su primera edición, afirmó este miércoles Bernie Ecclestone, patrón de la categoría reina del automovilismo.

Según el empresario británico, no existe la menor duda en cuanto a una resolución al respecto en la próxima reunión de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), el 7 de diciembre.

“¡Sí! Lo será (anulado), sin lugar a dudas”, dijo Ecclestone.

Este anuncio tuvo lugar después que el martes las obras del circuito en Austin (Texas) se detuvieran a causa de un conflicto entre los constructores, las instancias directivas de la F1 y los promotores del Gran Premio.

Otro golpe duro significó el anunció del estado de Texas, el martes, según el cual la subvención prevista de 25 millones de dólares (unos 18,5 millones de euros) no sería adelantada.

La última vez que Estados Unidos acogió a la Fórmula 1 fue en 2007, en el mítico circuito de Indianápolis.

En octubre, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, reveló que existía un proyecto para organizar un Gran Premio de América en 2013, en un circuito en la costa cercana a Nueva York.