El velocista jamaicano Usain Bolt, por tercera vez tras los galardones de 2008 y 2009, y la australiana Sally Pearson, reina de los 100 metros vallas, fueron elegidos este sábado en Mónaco como los mejores de 2011 por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF).

Bolt, de 25 años de edad, conservó en el Mundial de Daegu (Corea del Sur) los títulos de 200 metros y el de relevos 4×100 metros, en esta última prueba con un nuevo récord del mundo (37.04).

Sin embargo, falló en los 100 metros, donde fue eliminado por una salida falsa y la victoria fue finalmente para su compatriota Yohan Blake.

Mientras que para Bolt este reconocimiento ya no es una novedad, al obtenerlo por tercera vez e igualar en el palmarés al medio fondista marroquí Hicham El Guerrouj (2001/2002 y 2003), el otorgado a Pearson, nacida McLellan, era menos esperado, aunque la velocista tuvo una gran temporada.

Pearson, también de 25 años, dominó por su parte la final de las vallas altas en Corea del Sur, con el cuarto mejor crono de todos los tiempos (12.21) y el mejor desde hace 19 años.

Es también la primera vez que una atleta de Oceanía es reconocida a este nivel desde la instauración de estos trofeos en 1988. Estos galardones los otorga la Fundación Internacional de Atletismo (IAF), que depende de la IAFF.

“¿Se dijo que mi carrera (en Daegu) había sido como el agua corriendo entre las piedras por su fluidez? Es verdad, la carrera me pareció fácil. Pero la carrera perfecta sería batir el récord del mundo”, destacó la rubia Sally.

La “aussie” ganó 14 de las 15 carreras que disputó en 2011, con un solo “fracaso”, el 16 de setiembre en la final de la Liga Diamante en Bruselas, en la que se cayó.

Muchos quedaron decepcionados porque esperaban que el lauro fuera para la keniana Vivian Cheruiyot, quien logró el doblete 5000/10.000 m en Daegu, y en marzo se había consagrado campeona mundial de cross-country.

Por su parte, sin repetir sus excepcionales desempeños de 2008 (JO de Pekín) y de 2009 (Mundial de Berlín), el gran Bolt, aseguró su “reelección” después de que en 2010 lo destronara el keniano David Rudisha.

El poseedor del récord del mundo de los 800 m, quien logró el oro en Daegu, se encontraba en la terna final para el premio, así como el joven jamaicano Yohan Blake.

Lamine Diack, presidente de la IAAF, y el príncipe Alberto de Mónaco dieron en la ocasión recompensas al renombre más que orientadas al porvenir.

Pero, Bolt es consciente de que aún le faltan títulos y tiempo para convertirse en una leyenda viva. “Me convertiré (en ello) el día que haya defendido mis títulos en los Juegos Olímpicos”, destacó.

Bolt conservó en Daegu los títulos en 200 m y en relevos 4X100 m, con un nuevo récord mundial en esta prueba (37.04), que comparte con Blake.

Precisamente, a éste le dejó la corona de los 100 m en Daegu tras su largada en falso en la final, en la que hubiese sido la única confrontación directa del año entre los “amigos-rivales”. Además, Blake, con sus 19 segundos y 26/100 en los 200 m en Bruselas, quedó a sólo 7/100 del récord mundial de Bolt.