La nutricionista y docente de la Universidad San Sebastián, Tamara Pákozdi, afirmó que preferir alimentos de origen vegetal tiene mayores beneficios para la salud que aquellos que se venden en cápsulas, ya que el cuerpo recibe otros nutrientes como vitaminas y minerales.

Los humanos sufren estrés biológico conocido también como estrés oxidativo que produce sustancias oxidadas como los radicales libres, los cuales tienen efectos dañinos para la salud, siendo en parte los responsables de contraer ciertos tipos de cáncer, enfermedades cardiovasculares e incluso respiratorias.

Pázkozdi expresó que los antioxidantes se encuentran en frutas y verduras principalmente en aquellos de color intenso.

“Si bien el mercado ofrece múltiples tipos de antioxidantes en forma de suplementos, son los alimentos de origen vegetal los que resultan beneficiosos para nuestro organismo, ya que a la vez recibimos otros nutrientes como minerales, vitaminas y fibra que no contienen los antioxidantes envasados”, puntualizó la experta.

La profesional mencionó algunos alimentos ricos en antioxidantes y que son consumidos a diario por los chilenos, tales como el té negro, expresando que lo ideal es que éste sea lo más natural posible y ojalá sin ser envasado.

También el Café, que según la docente, “es la estrella de los antioxidantes. Debe ser de grano, molido y filtrado, la dosis aconsejada de 7 a 9 gramos por tasa para no generar efectos nocivos en el organismo”.

Igualmente, el té verde y el tomate, porque contienen Licopeno, un antioxidante poderoso contra el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. El ajo y cebollín, que son verduras y parte del grupo antioxidante Allium. El cebollín protege contra el cáncer de estómago, mientras que el ajo previene el cáncer de colon y recto.

Asimismo, los berries, contienen un antioxidante que se llama antocianinas, sustancias responsables de los colores morados, violetas y azul de las frutas. Se sabe que previenen las infecciones del tracto urinario, por lo que su uso es más frecuente sobre todo en adultos mayores en los que esta enfermedad es prevalente.

Respecto a cómo y cuánto comer, Pákozdi manifestó que cocinar con temperaturas elevadas disminuye en diferentes porcentajes el poder antioxidante.

Mientras que congelar alimentos no afectaría la disminución de estas sustancias, lo que permite congelar frutas y verduras de acuerdo a su estacionalidad y disponer de ellos durante todo el año.

Por otra parte, dijo que se ha demostrado que el proceso de secado de los alimentos aumenta la concentración de antioxidantes. Por lo que frutos deshidratados como kiwi, durazno, ciruelas deshidratados son ricos en estas sustancias.