Subrayando la importancia de disminuir los niveles de violencia que se han registrado en varias de las manifestaciones públicas de los últimos meses, el diputado Enrique van Rysselberghe, hizo un enfático llamado a “tomar cartas en el asunto” y concretar a la brevedad una Ley Especial de Control de la Violencia en Manifestaciones Públicas.

Al respecto, el legislador UDI expresó que “por años hemos escuchado que hay vándalos que se infiltran en las manifestaciones públicas y que las aprovechan para romper vidrios, cortar calles, quemar autos, saquear locales, etc. Tengo la convicción de que llegó el minuto de identificar, apresar y sancionar ejemplificadoramente a estos antisociales”.

En esa línea, el parlamentario gremialista señaló: “Debemos saber quiénes son y por qué lo hacen, y generar todos los incentivos para que no lo vuelvan a hacer, por lo que urge una Ley Especial de Control de la Violencia en las Manifestaciones para garantizar que las personas que incurren en estos actos vandálicos paguen las consecuencias”.

Evocando una moción de su autoría presentada en Julio pasado y cuyos principios fueron recogidos por el Ministerio del Interior para la elaboración de un proyecto de ley destinado a endurecer las penas contra quienes cometan desórdenes públicos, el diputado UDI afirmó que “Chile necesita con urgencia nuevas reglas del juego para brindar seguridad a su gente”.

“En Julio pasado ingresé un Proyecto de Ley de Control de la Violencia en las Manifestaciones Públicas que recoge los principios que se aplicaron en Inglaterra para contener las barras bravas en el mundo del fútbol, y que les permitieron a las familias volver a los estadios. ¿Y qué se hizo ahí? No se persiguió a los organizadores de los partidos de fútbol, sino directamente a quienes generaban los desórdenes, identificándolos, apresándolos, juzgándolos y sancionándolos. Aquí hay que hacer exactamente lo mismo”, aseveró.

Por lo anterior, Enrique van Rysselberghe subrayó que para disminuir y terminar con la violencia en las movilizaciones y manifestaciones, es necesario “ir por quienes generan los desórdenes y no por quienes organizan las manifestaciones, ya que las manifestaciones son un derecho garantizado constitucionalmente en democracia”.

“Debemos entregar a los organismos del Estado las facultades y las herramientas para que puedan hacer efectiva esta tarea. Y esto es urgente, porque los graves desmanes y la violencia extrema la estamos viviendo ahora”, concluyó.