Nuevamente los ex trabajadores de la fábrica de mezclilla Tavex sufren los embates del cierre de la planta, más conocida como ex Machasa. Esta vez porque uno de los arrendatarios de las instalaciones del sindicato los desconoce como dueños de la propiedad y simplemente no pretende seguir pagando.

Esto pese a que como organización los trabajadores cambiaron su figura legal y se constituyeron en sindicato de trabajadores eventuales y transitorios, así recuperaron el gimnasio y sus históricas oficinas de calle Santa Sofía, en Chiguayante.

Ismael Toloza, presidente del sindicato explicó que incluso el arrendatario, pretende inscribir el terreno a su nombre. Sin embargo el municipio de Chiguayante y la Gobernación penquista están asesorando al sindicato para evitar la pérdida del espacio.

Se trata de Ernesto López que arrienda desde hace 13 años un espacio al sindicato. Los 3 primeros años no pagó, porque le facilitaron el lugar para ayudarlo a iniciar su negocio. Posteriormente se hizo un contrato por 40 mil pesos y que actualmente se eleva a 70 mil.

Las sopechas del sindicato van más allá, porque en septiembre sufrieron el robo de sus cajas fuertes; bóvedas que después aparecieron, sin embargo lo único que no estaba en su lugar -además del dinero- fueron los contratos de arriendo y documentos de propiedad del sindicato.