Sorpresa generó en redes sociales un video donde obispos y cardenales alemanes no responden al saludo del Papa Benedicto XVI en Berlín.

Las imágenes muestran al Santo Padre quedar literalmente con la mano estirada frente a la indiferencia de sacerdotes que en fila sí dieron su saludo a un político que lo antecedía.

Si bien la actitud de los prelados podría responder tal vez a cierto protocolo, no deja de sorprender cómo el Papa ofrece su mano, sin obtener respuesta, salvo un par de excepciones.