Estableciendo una diferencia con su postura inicial, el obispo de la Diócesis de Los Ángeles, Felipe Bacarreza, consideró como un escándalo las denuncias de abusos sexuales que pesan sobre un sacerdote belga que ejerció en la zona de Santa Bárbara.

Recordemos que por la vía del exhorto, el Ministerio Público del Rey de Bélgica está indagando al cura Alfonso Gielis, a raíz de abusos sexuales cometidas a menores pehuenches de un hogar indígena en 1992.

Bacarreza dijo en un principio que los cargos en contra de Gielis eran por hechos ocurridos en Bélgica pero ahora corrigió, admitiendo que se trataba de situaciones sucedidas en la zona.

A juicio del obispo, ese tipo de denuncias que involucran a sacerdotes es un verdadero escándalo que perjudica mucho a la iglesia católica.

Sin embargo, Felipe Bacarreza matizó sus declaraciones haciendo ver que las denuncias datan de hace varios años.

Mientras tanto, la Brigada de Delitos Sexuales y Menores de la Policía de Investigaciones de Los Ángeles sigue adelante con sus diligencias para ubicar y tomar declaraciones a las personas que estuvieron en el hogar indígena de Santa Bárbara.