El volante paraguayo de Colo Colo Osmar Molinas, que marcó el autogol del empate entre Colo Colo y Universidad de Chile en el Superclásico en los segundos finales de este partido, señaló este lunes que se sintió muy afectado tras la conquista en propia puerta.

El cuadro albo ganaba por dos goles a uno, cumplido el tiempo reglamentario en el superclásico número 168 del fútbol nacional, cuando un tiro de balón detenido sobre la derecha del ataque de la ‘U’, es cabeceado desde cerca de 20 metros hacia atrás por el jugador del cacique. Resultó tan bombeado el desvío, que descolocó totalmente a un resentido portero Raúl Olivares y la pelota da en el poste izquierdo y se va al fondo del arco, desatando la alegría azul en Macul.

“Fue un partido medio raro que teníamos todo para liquidar el partido y no pudimos y a 30 segundos hice un autogol, es medio complicado la cosa, pero hay que dar vuelta la página y reponerse lo más rápido posible de esto”, dijo a Bío-Bío Deportes.

El mediocampista de corte agregó que: “Las 40 mil personas después de estar saltando y festejando el triunfo se quedaron en silencio. No sabía si correr o qué hacer, no sabía dónde meter la cara. Quedé muy dolido, son cosas que pasan y que eso ocurra a 30 segundos del final es doloroso”, aseveró.

Molinas, pese a tener un rendimiento regular en este partido, convirtió en propia puerta en el minuto 102 del ‘derby’ chileno, con lo que la Universidad de Chile consiguió el agónico empate a dos goles en el Monumental en duelo válido por la decimocuarta fecha del Clausura.